Maestros del tiempo
El chef Nacho Manzano propone una ruta gastronómica en 24 horas por Asturias para desvelar todos los matices de su cocina y disfrutar con de sus espectaculares y salvajes paisajes.
Por Lorena Papí
Dicen de Asturias que es un paraíso natural. Por sus valles, de verdor infinito, y sus costas, salvajemente bellas. Por sus impresionantes montañas. Y por sus desafiantes acantilados.
Pero la naturaleza no es su único tesoro. Destaca su arquitectura, legado vivo del arte prerrománico. Merece la pena perderse en sus aldeas, guardianas de la tradición, que permanecen escondidas entre montañas. Lugares en los que el tiempo parece haberse detenido, descansando sobre la piedra de antiguas casas. Y su cocina, tan rica en tradición y en sabor, resulta imprescindible.
Como la propuesta gastronómica del chef Nacho Manzano, que es el reflejo de su vida en estas tierras. Que recoge con una mirada singular su legado gastronómico. Tanto el de su tierra como el personal: las recetas transmitidas con amor por su abuela, que le infundió la pasión por la cocina.
Sus creaciones culinarias no son sino producto de su felicidad. Porque vive su sueño —dedicarse a la restauración— y lo hace en el mismo lugar en el que creció feliz, entre fogones. Descubriendo aromas, las riquezas del entorno y el respeto por el producto autóctono que aprendió de sus padres.
De la mano de Nacho Manzano, parte de ese grupo de chefs asociados con Cervezas Alhambra, que comparten visión y filosofía con la firma cervecera, Asturias desvela sus riquezas, naturales y gastronómicas. Él es el anfitrión de este tour gastronómico en 24 horas, desvelando todos los matices de esta tierra.
Propuestas —las que ofrece este entorno único, pero también su gastronomía— que maridan a la perfección con Cervezas Alhambra. Porque están hechas, como esta experiencia, para disfrutar sin prisa.
Desayunar como reyes: el hórreo del Palacio de Rubianes
Conocer Asturias pasa también por descubrir su forma de vida, su cultura, sus construcciones típicas. Desayunar en un hórreo —un antiguo granero elevado para proteger su contenido— ubicado en un palacio restaurado es un buen comienzo en la búsqueda de la esencia asturiana.
Es lo que ofrece el hórreo del Palacio de Rubianes (en la parroquia de Cereceda y dentro del concejo de Piloña) desde su idílica postal: un entorno único por sus patrimonio ecológico. Esta clásica construcción reconvertida en hotel se ubica en la misma falda de un monte —el Macizo Sueve— en el que se puede encontrar el único bosque de tejos milenarios conservado en Europa y el hogar de algunos ejemplares de caballo asturiano.
Un lugar en el que reina el silencio, perfecto para empezar el día con la calma, que se requiere para que los sentidos disfruten de un completo, equilibrado y opíparo desayuno con el que tomar fuerzas y preparar el espíritu.
Saborear la tradición en cada cucharada: comida en Molín de Mingo
Un antiguo molino rehabilitado da cobijo a un restaurante con encanto, en el que todo está cuidado al máximo detalle para no desentonar con el entorno. En el que la naturaleza, sin riendas, asoma por las ventanas.
Su privilegiada ubicación —”en los caminos de bellos parajes en Peruyes”— y su valor arquitectónico —la finca cuenta con dos casonas y un hórreo habilitado para el servicio— son algunos de los muchos valores del Molín de Mingo.
Otro es su cocina, que se mueve bajo la batuta de Dulce Martínez, entre los 100 mejores chefs con talento emergente según la lista anual publicada por una prestigiosa publicación gastronómica. Y compañera de vida de Nacho Manzano.
Es una cocina con fuerte arraigo, como el propio Molín de Mingo, a la tierra. Con un enorme respeto por la historia de la cocina asturiana que se hace patente en la siguiente propuesta de este tour: paladear con toda la calma posible cada cucharada de una auténtica fabada, maridada con Alhambra Reserva Roja.
Porque es la creación de Cervezas Alhambra perfecta para un plato como este, con alto contenido graso. La intensidad de una Alhambra Reserva Roja y su grado alcohólico contribuyen a limpiar el paladar, para disfrutar así de los distintos matices del plato. Y sus notas de cereal tostado armonizan con el fuerte sabor ahumado del embutido.
Disfrutar de las delicias del Cantábrico: aperitivo en el Restaurante Miradoriu
Relajarse ante unas vistas al mar y deleitarse al tiempo con esos tesoros que regala, es uno de esos planes llenos de magia; porque no hay nada de cotidiano en tomarse el tiempo necesario para dejar que el paisaje impacte y deje un poso en el alma del viajero.
Por eso es la siguiente propuesta de este tour, que bien merece, antes de que el sol se esconda, un paseo por la playa de Vega (Ribadesella).
El Restaurante Miradoriu espera casi a pie de arena, para redondear la tarde con un aperitivo con sabor a Cantábrico y una Alhambra Reserva 1925. Una cerveza en sintonía con estos momentos y con los snacks, por la armónica combinación de dulces, salados y amargos.
La sugerencia de Nacho pasa por combinarla con las propuestas de latería que ofrece el restaurante: de sardinas en escabeche, de pulpo a la brasa, de ventresca de atún y de calamar en su tinta a la brasa… Los tesoros del mar son las verdaderas estrellas de la carta del Miradoriu y aprovechar el producto de temporada, en su máximo esplendor, su leitmotiv.
Homenajear a la cocina de la Tierrina: cena en Casa Marcial
Casa Marcial (Arriondas, Concejo de Parres) ha vivido ya dos vidas. Lo fundaron los padres de Nacho Manzano, en 1971. Más de 20 años después, en 1993, Nacho y su hermana Eva se situaron al frente del negocio familiar e iniciaron su propio proyecto. La primera de sus dos estrellas Michelin solo tardaría seis años en llegar y a ellas les seguirían tres soles Repsol.
La trayectoria de Nacho ha sido reconocida incluso por la Real Academia de Gastronomía, que le ha otorgado recientemente el Premio Nacional de Gastronomía 2021 al Mejor Jefe de Cocina.
“Nuestra cocina es una prolongación de nuestra manera de entender la vida, exprimiendo la localización y la tradición como punto de partida para crear nuestro propio lenguaje culinario”, dicen sobre este proyecto.
Un proyecto continuista, porque sigue la misma filosofía que en sus inicios: homenajear a Asturias, y a los frutos de esta tierra. Con platos tan arraigados como el Arroz con Pitu de Caleya. Pero aportando también esa mirada nueva, con creaciones tan singulares como su Xarda, Mostaza encurtida, Aceituna verde y Capuchina.
Su idea de unir presente y pasado en el plato se desarrolla hasta el postre, con innovadoras formas de presentar un arroz con leche como su Arroz con leche, Boletus y Cristal de Caramelo. Propuestas dulces que se dejan también redondear con Cervezas Alhambra. Con las Las Numeradas de Cervezas Alhambra | Cacao: Cacao y piel de naranja y Cacao y chile chipotle, tan ricas en matices, como resultado de un proceso de elaboración único.
“Ahondamos en nuestro legado gastronómico, las raíces, la estacionalidad y la integridad del producto para evocar al recuerdo a través del paladar, aportando un elemento de sorpresa y modernidad”.
Es esta forma de entender la cocina la que le hizo decantarse por incluir a Cervezas Alhambra en su carta, como propuesta de maridaje. Porque poner en valor su origen y el trabajo de sus antecesores, buscando al mismo tiempo esa mirada singular y contemporánea, es lo que define a la firma cervecera.
Es un punto de encuentro, esta filosofía, entre el chef asturiano y la marca granadina. Una visión compartida que les une, y que maridan a la perfección en la mesa. Y que vertebra esta experiencia: 24 horas (24 vidas) desvelando todos los matices de Asturias.
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