Creadores - Flamenco
'La reina del metal', el tablao flamenco más industrial
La bailaora Vanesa Aibar y el compositor Enric Monfort mimetizan sus lenguajes en una creación sonora y visual sin precedentes. Una producción que, sin duda, rompe los códigos más tradicionales del flamenco.
En la música, en la moda, en su forma de inspirar a otras disciplinas y, por supuesto, en la danza, el flamenco vive ahora uno de sus momentos más fructíferos. Y no es cosa de tendencias momentáneas, sino que son muchos los creadores que llevan décadas abriendo nuevos caminos y posibilidades a través de la experimentación.
El bailaor Israel Galván siempre relata lo difícil que le resultó romper con las fórmulas clásicas del arte del zapateo en sus inicios. Sin embargo, ahora su obra no solo recibe importantes galardones, sino que también se expone en museos contemporáneos y en los festivales de danza más prestigiosos del mundo.
Los zapatos, la bata de cola, el mantón y los palillos son las herramientas, pero la nueva oleada de creadores de danza flamencos tiene mucho que decir y explorar a través de caminos más innovadores. Una de ella es Vanesa Aibar, que ha unido fuerzas con el músico Enric Monfort en una de las grandes producciones del momento: La reina del metal.
Un encuentro único entre dos universos creativos
En la escena de La Reina del Metal no hay telones que cuelgan del techo, sino cadenas. Forman parte de la imponente escenografía de aspecto industrial que inunda esta pieza, donde el movimiento flamenco y el espacio sonoro se conjugan. Sus artífices, Vanesa Aibar y Enric Monfort, han encontrado en sus respectivos lenguajes creativos un mismo núcleo, resultado de una larga investigación.
Galardonada con el Premio MAX al Mejor Espectáculo de Danza y a la Mejor Intérprete de Danza en 2023, La Reina del Metal puede presumir de ser una de las creaciones más ambiciosas de la escena flamenca y contemporánea. Aibar y Monfort se han inspirado en los rituales de paso, no con el objetivo de recrear uno, sino de revisar cómo estos transforman a quien habita la escena.
Pero quien espere encontrar en este trabajo tan solo un tablao flamenco con toques industriales se llevará toda una sorpresa. Y es que ambos artistas han trabajado para desarrollar una ambientación propia, en la que ambos elementos -música y danza flamenca- se fusionan. Es más, gracias a la tecnología de espacialización 4DSOUND, la obra proporciona a los espectadores una auténtica experiencia inmersiva, similar a la de un concierto de electrónica.
Incluso recordará a muchos apasionados de la danza a la mítica Ruhr-Ort, de la emblemática coreógrafa Susanne Linke, heredera del expresionismo alemán, que allá por los 90 tomó la industria metalúrgica como inspiración para su trabajo. Más de 30 años después, Aibar y Monfort han desarrollado una fantasía escénica igual de emblemática, pero desde lugares tan dispares como la percusión y el flamenco.
Aibar y Monfort, destinados a encontrarse
La Reina del Metal se ha materializado y se ha ganado al público gracias al empeño de dos creadores. Y, en vista de la buena acogida que ha tenido, parece que Aibar y Monfort parecían destinados a encontrarse.
Por su parte, la bailaora lleva varios años dedicada a las artes del movimiento, compaginando la creación de espectáculos con el comisariado de proyectos y la investigación. Es una gran conocedora de la tradición que, a su vez, ofrece una mirada en pos de la innovación, lo que le ha hecho ganarse el prestigio de su propio sector con diversos galardones y reconocimientos.
Su gran empeño es la renovación de las estructuras coreográficas del flamenco. Prueba de esta motivación son los trabajos que conforman su repertorio, como Sierpe, Liminal, Áspid, Todas las noches o El Espejo, un trabajo en el que colaboró con la compañía Danza Mobile (especializada en diversidad y participación social), seleccionado por el Circuito de la Red Acieloabierto.
Aibar, que está siempre en constante diálogo con profesionales de las artes, la tecnología y la ciencia, tuvo la suerte de dar con el músico holandés-español Enric Monfort antes de poner en marcha La Reina del Metal. El percusionista y compositor tiene una larga trayectoria en el mundo de la escena clásica y contemporánea, aunque el uso del sonido como elemento dramatúrgico se ha convertido, poco a poco, en su sello de identidad.
Suele realizar instalaciones y composiciones donde los espacios también proporcionan un fuerte impacto poético. Exactamente como ocurre en la producción desarrollada junto a Vanesa Aibar y por la que ambos recibieron también el Premio PAD al Mejor diseño de espacio escénico.
Pero es que cuando el talento se duplica y abre nuevos caminos hay que admirarlo. Y, sin duda, para La Reina del Metal y su equipo, que no han parado de recibir espectadores en los diversos escenarios españoles, este está siendo un gran año.
Imágenes | Alex Rademakers
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