Maestros del tiempo
Por Cervezas Alhambra
Las pantallas están teniendo un papel protagonista en estos días de vida hacia dentro. Desde las del móvil, que usamos para mantenernos al tanto de la actualidad o en contacto con nuestros seres queridos, hasta las del ordenador o la televisión, donde la vida sigue sucediendo y puede acercarse a todos.
En estos días en los que todo sucede en casa, resulta reconfortante comprobar que la mayoría de plataformas están poniendo su granito de arena para sacarnos de una realidad más sombría y acercarnos a otras historias, que, muchas veces, vivimos como propias.
Ahora que nos replanteamos la experiencia en un plano más cercano y vemos la importancia de la proximidad, quizá sea una buena época para volver a adentrarnos en el cine español. Y es que tenemos auténticas joyas en la filmografía de nuestro país. La historia de nuestro cine cuenta con brillantes profesionales de todas las áreas cinematográficas, pues bien sabemos que una película es, al final, un producto coral. La Filmoteca Española tiene una propuesta para acompañarnos en casa a la vez que redescubrimos los clásicos y no tan clásicos de nuestro cine. Desde reportajes sobre su historia y documentales, hasta un extenso programa de películas. Desde el canal Doré en casa estamos a un paso de numerosas películas que cuentan nuestra historia colectiva.
Una programación basada en la experiencia del cine
unque ahora echemos de menos las salas emblemáticas del Cine Doré, sus taquillas y el pequeño bar a la entrada, la idea de la Filmoteca es que los días de espera y la nostalgia se apacigüen ligeramente, acercándonos al lugar donde ocurre su magia desde nuestros propios hogares. Desde el mes de marzo están programando películas que buscan recordarnos que, a lo largo de nuestra historia, hemos tenido cineastas capaces de dar vida a auténticas obras de arte.
La programación no es a la carta, sino que tendrán “en cartelera” unas cuatro películas o vídeos durante tres días y, una vez que haya pasado ese tiempo, se renovarán las propuestas. De hecho, será a través de su canal en Vimeo desde donde se proyectarán las películas de manera accesible y gratuita. Una forma de tener el cine español al alcance de la mano, con la confianza de que siempre tendrán una butaca guardada para cada uno de nosotros.
Nuestro cine clásico se une a la campaña de #LaCulturaEnTuCasa que está promoviendo estos días el Ministerio de Cultura. Las películas del canal forman parte de algunas retrospectivas que se dedicaron a autores como Antonio Moreno, Pedro Almodóvar o Carlos Saura en la plataforma de Filmin; cintas que también fueron proyectadas en el mismo Cine Doré en los últimos tres años.
Películas restauradas y sorpresas cinematográficas
Uno de los objetivos de la Filmoteca Española es acercar al público español la filmografía de su país. Para ello, cuentan con una larga experiencia de restauración de películas olvidadas, cuya disponibilidad no era posible de ninguna forma. Gracias a estos proyectos, son muchas las cintas que han podido ir restaurando a lo largo de los años y que ahora, con la iniciativa del Doré en casa, están al alcance de todos.
A finales de abril, la Filmoteca se va a centrar en el recuerdo del 80º aniversario del nacimiento de Pilar Miró, una de las grandes cineastas de nuestro país del siglo XX. El homenaje va a consistir en la proyección de algunas piezas de su cinematografía que resultan desconocidas porque fueron grabadas al inicio de su carrera profesional.
El 24 de abril se podrán ver dos cortometrajes de la colección de la Escuela Oficial de Cinematografía de la Filmoteca, como son Pilar (Juan Tébar, 1966) y Luciano (Claudio Guerín Hill, 1965), además de dos documentales que la cineasta preparó para el Ministerio de Educación y Ciencia en el año 1966.
El Día del Libro, que también tiene lugar entre esas fechas, también tendrá su pequeño hueco de celebración con la película Lecciones de buen amor (Rafael Gil, 1944), una adaptación de la obra de teatro de Jacinto Benavente. Toda una ocasión para salir de casa en espíritu y dejarnos llevar a esos mundos ficticios, tan conectados con el real, que siempre han dibujado los cineastas españoles.