Maestros del tiempo
Presente en la forma de vivir, en los libros que enganchan, en las sesiones de 'techno' y en en quinto episodio de La Mirada Singular. El ritmo, según Javiera Mena, sin melodías ni artificios.
Por Iñigo Lauzurica Martínez
El ritmo es la forma de lenguaje más ancestral. Es el que marca la pauta de la música, el responsable de los algoritmos matemáticos, de la poesía, de los silencios que tanto dicen al recitar y de la forma de vivir (sin prisas). Es también el protagonista del quinto episodio de La Mirada Singular, el podcast de Cervezas Alhambra para escuchar sin prisa (disponible en Spotify, Google Podcast y otras plataformas habituales).
Un ritmo que, cuando cesa y para los instantes, permite a la cantante y compositora Javiera Mena degustar su Alhambra Reserva 1925. Le gusta por nuestra botella, por no tener etiquetas y por encapsular esta sucesión rítmica de sorbos, como si de una lámpara de genio se tratara.
Pero, cuando el ritmo se acelera, también puede ser el mejor punto de partida. Sobre todo para una creadora cada vez más interesada por el poder del bit, por huir de lo melódico y por retomar raíces que la llevan hasta su Chile natal y otros paraísos musicales de Latinoamérica.
La razón por la que es capaz de permanecer más de diez minutos escuchando la clásica canción El Cantante, de Héctor Lavoe, y querer regresar al Puerto Rico que tan buenos recuerdos le trae o seguir inmersa en sus días de auriculares y salsa.
¿Qué ritmo tiene Madrid? ¿... y Santiago de Chile?
Para una artista que vive ahora afincada en Madrid, los países y las ciudades también tienen su propio ritmo. O al menos ha sido uno de los temas que más interés ha suscitado en la larga y tendida conversación que Javiera ha mantenido en este quinto episodio de La Mirada Singular con los conductores del podcast: la también compositora y música Anni B. Sweet, y el poeta y musicólogo Antonio Soriano Santacruz.
En esta conversación -informal- entre tres artistas no hay entrevistador, ni entrevistado. Solo preguntas que lanzamos al aire, que inspiran, que invitan a compartir y que se traducen en ideas y percepciones.
Pensamientos como que el ritmo todo lo ocupa y lo define: hasta la música de Madrid, que suena a techno, o la de Santiago de Chile, que es un dub relajado, festivo y sin complejos. Pero también buscamos averiguar qué papel tiene el ritmo en la poesía, en las letras, en la musicalidad de los versos y en la peculiaridad de un idioma como el español.
Una lengua que es emblema de los poemas de Antonio Soriano Santacruz, pero también de las letras de Víctor Jara, que llenan de tiernos recuerdos la memoria musical de Javiera Mena y de Anni B. Sweet, aún cuando a ambas las separaba la inmensidad del Atlántico.
Sobre lo melódico, lo bailongo y lo primitivo, ya en Spotify
Decía el coreógrafo Merce Cunningham: “Dance is not emotion, but motion”. Lo que vendría a traducirse como que “la danza no es emoción, es movimiento”. Una percepción que mantiene Javiera al crear su música -desde el ritmo y sin melodías-, o de bailar sin límites a ritmo de techno y de la que habla en este capítulo, maridado con Alhambra Lager Singular. Y es que este es un ritual que tiene algo de ancestral y primitivo, capaz de conectar cuerpo y música en su estado más puro.
Detalles sobre el ritmo sin artificios externos que son toda una revelación para los presentadores de La Mirada Singular, a pesar de tener trayectorias cien por cien ligadas a la música. Porque si algo busca este pequeño espacio sonoro es usar bien el tiempo para recorrer, una a una, las formas con la que el ritmo entra, sale y lo transforma todo.
Lo explican bien los tres conversadores de nuestro podcast, que hablan sobre la relación entre el ritmo y los recuerdos, la música y el cine, las canciones que conforman nuestra banda sonora o las novelas que conquistan por jugar con la acción y el tiempo. Expresiones rítmicas que nos acompañan allá donde vamos, como cada uno de los episodios de nuestra tertulia, en los que el ritmo siempre es afable, inspirador y relajado.
Toda una invitación a emular a Javiera Mena con sus auriculares: cuando quieras y al ritmo que prefieras.
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