Maestros del tiempo
La fruta de moda tiene origen tropical y llega a nuestras cocinas con un secreto oculto: su pulpa es un sustituto perfecto de la carne animal. Pero esta no es -ni de lejos- su única propiedad.
Por Esther Morales
Carne parece y fruta tropical es. Recibe el nombre de jackfruit -yaca, en castellano- y lleva ya tiempo colándose entre las estanterías de los mercados. También entre los cultivos de la Costa Tropical andaluza, donde comparte espacio con los aguacates, mangos, papayas y chirimoyas que nos animar a descubrir lo mejor de lo exótico.
Una más de la familia de frutas tropicales que, poco a poco, se cuela entre nuestras recetas. En su caso, casi como un trampantojo con textura de carne, perfecta para incorporar a elaboraciones 100% vegetales. O, también, como una invitación para desarrollar sabores que nos lleven hasta Bangladesh, Indonesia, India, Sri Lanka o Tailandia, de donde proviene esta delicia.
Grande en tamaño y en espíritu, pues sus piezas de hasta 40 kilogramos albergan un sinfín de atributos, texturas y matices. Una experiencia tan apasionante como perderse entre las diferentes variedades de Cervezas Alhambra, saborearlas y dejarse conquistar por sus posibilidades. En ellas se halla el mejor maridaje para acompañar al jackfruit y dejar que se convierta en un asiduo de nuestras cocinas.
Desde Bangladesh a la Costa Tropical
El jackfruit no es la primera fruta tropical que llega hasta los cultivos de la costa andaluza. Sí que pertenece a toda esa generación de frutas desconocidas, como el breadfruit, el chempedak o la guanabana, que poco a poco han comenzado a introducirse en Europa por sus innumerables cualidades.
En el caso del jackfruit, considerada como la fruta nacional de Bangladesh, el interés ha sido mayor por sus atributos y posibilidades. Para empezar, porque ha atraído a los paladares de comensales vegetarianos y veganos a través de su sabor y textura, muy similar a la de la carne. Además, su composición nutricional, muy alta en agua y vitaminas, es una razón muy convincente para aquellas personas que buscan elecciones gastronómicas tan sabrosas como saludables.
Por otro lado, con su llegada hasta Andalucía, el jackfruit ya puede considerarse como un producto de cercanía, a nuestra disposición en fruterías y supermercados. Pero, si no fuera así, también es posible encontrarlo en diferentes formatos, como al vacío o en botes de cristal, listo para cocinar y preparar exquisitas recetas totalmente vegetales.
No obstante, aunque la fruta ha ganado fama por tener una textura muy similar a la carne, también es posible tomarla fresca y al natural. Para ello, solo es necesario sustraer la corteza y el corazón, eliminar las fibras y extraer las porciones de pulpa que rodean a las semillas (que, por cierto, también son comestibles).
Cocina con jackfruit
Pocos hubiesen augurado, hace años, que una fruta tan particular tuviese la capacidad de recrear tan bien el sabor y la textura de la carne. Sin embargo, en lugares como la India, donde la cocina vegetariana influye a culturas de todo el mundo, el jackfruit ya tiene un largo historial como protagonista de platos de curry. Occidente, por su parte, ha sabido adaptarla a sus gustos con otro tipo de elaboraciones, como estas tres recetas veggies.
Hamburguesa de pulled pork vegano
Con la pulpa del jackfruit, cocinada con diferentes condimentos o, incluso, con salsas tipo soja o teriyaki, podemos recrear un pulled pork vegetal de lo más convincente. Para presentarlo en modo de hamburguesa, lo más recomendable es utilizar un pan tipo brioche y acompañar con vegetales como ensalada de repollo o encurtidos. El resultado es un bocado intenso y con un toque dulce, que combinará perfectamente con los matices tostados de un maridaje como Alhambra Reserva Roja.
Turon
El turon es un plato de origen filipino. Se compone de plátano -preferiblemente, verde-, jackfruit y hojas de masa filo, con las que se rodea cuidadosamente el contenido. Los rollos resultantes se suelen cocinar con un poco de azúcar para obtener un toque dulce extra (además del naturalmente presente en la fruta).
Semillas de jackfruit
Las semillas del jackfruit no sirven para una receta única, sino que tienen multitud de usos. Por ejemplo, hay quien las tritura y las utiliza como harina sin gluten. También son muy interesantes tostadas, como si fueran un fruto seco. En ese caso, las podemos incorporar a ensaladas y postres o, simplemente, servir como snack, acompañadas de Alhambra Reserva 1925. Todo un clásico para deleitarse sin prisa y descubrir otra de las infinitas posibilidades del jackfruit en la cocina.
Compartir