Es Tendencia - Gastronomía
Así es el fenómeno K-food: la gastronomía coreana que vas a querer probar
Sorprendente, deliciosa y en plena tendencia. Nos sumamos a la k-wave a través del paladar con los platos más populares de la gastronomía coreana
Corea lleva varias temporadas en el top de los destinos viajeros más deseados. Es la respuesta a toda una fiebre por su cultura, su música, su moda e, incluso, por su cosmética. Pero todo aquel que no ha tenido el privilegio de pasearse por los barrios de Seúl, de visitar los mercados del pescado de Busán o de perderse entre los templos de Gyeongju tiene también una manera alternativa de conocer el país de moda.
Lo haremos a través de sus sabores, ingredientes y recetas, iconos de una gastronomía que cada vez es más habitual encontrar dentro de nuestras fronteras. Una fusión única entre fermentos, carnes bien entendidas, retos bastante picantes para el paladar europeo y propuestas de street food de las que enamorarse.
Nos adentramos en el fenómeno k-food con cinco de los platos coreanos más populares. Una selección gastronómica diversa y deliciosa, que refleja a la perfección el talento de Corea para conquistar con sus complejos sabores.
Kimchi, fermentando a otro nivel
Si hay un plato que representa a la perfección la esencia coreana, ese es el kimchi. Es más, se suele incluir como acompañante en prácticamente cualquier restaurante. Su sabor oscila entre lo picante y lo ácido, pues está elaborado con col china y rábanos, que se mezclan con ajo, jengibre, chile rojo en polvo y otros condimentos, y se deja fermentar. Se trata de una receta que ha formado parte de la dieta coreana durante siglos y que fácilmente podemos encontrar en España, en tiendas especializadas. Además, una buena forma de maridar la experiencia es con una variedad suave y equilibrada como Alhambra Especial, que funciona perfectamente con los matices picante de esta receta.
Bibimbap: el arroz ‘con cosas’ más emblemático
El bibimbap es un plato muy apreciado por su equilibrio de sabores y colores. Su nombre significa ‘arroz mezclado’, y consiste en una base de arroz blanco sobre la cual se colocan diversos ingredientes: verduras frescas y cocidas, carne marinada (generalmente de res), huevo frito y pasta de chile rojo (gochujang). También es fundamental que cada componente se disponga de manera estética a la hora de presentarlo, lo que da como resultado un vibrante arcoíris culinario. Eso sí, antes de comer toca mezclarlo todo, para extraer sus diversos sabores y texturas en cada bocado.
No es sushi: es Kimbap
Con solo ver la presentación de este plato coreano cualquiera podría pensar que se trata de sushi. No obstante, existen bastantes diferencias respecto al popular plato japonés. El kimbap se presenta en rodajas más grandes, lo que además ayuda a incluir muchos más ingredientes. Se compone de arroz sazonado con sal y aceite de sésamo, al que se añaden productos como zanahorias, espinacas, huevo, rábanos encurtidos y, a menudo, carne o mariscos. Todo esto se enrolla con un alga seca (o gim) y se corta en rodajas, lo que hace que sea una receta perfecta para llevar o para disfrutar en un pícnic en el parque, muy en sintonía con los gustos coreanos.
Dakgangjeong, el pollo frito coreano
Doble fritura, una salsa entre lo picante y lo dulce, y almendras a modo de topping. Crujiente en su exterior y jugoso en su interior, el popular pollo frito coreano nada tiene que envidiar a otras versiones de comida rápida más extendidas. En Corea es habitual encontrarlo en puestos de comida callejera, aunque se ha hecho tan conocido que lo podremos pedir también en restaurantes de k-food españoles. Es más, algunos acompañan la experiencia con unos guantes de plástico, para poder disfrutarlos al máximo sin que se nos queden las manos pegajosas. ¿Nuestra recomendación? Maridar esta receta con Alhambra Reserva 1925, la mejor elección para combinar con el pollo y las almendras. Nos regalará un balance entre dulce y amargo muy interesante en boca, perfecto para contrastar con la singularidad del dakgangjeong.
Barbacoa coreana: un poco de todo
La barbacoa coreana es la experiencia culinaria interactiva por excelencia. En ella, son los comensales los que cocinan su propia carne, normalmente en parrillas ya integradas en la mesa. Se pueden encontrar en cualquier parte del país, aunque hay barrios de Seúl en los que puede parecer que hay más barbacoas que habitantes. Normalmente se puede escoger la carne al gusto, aunque son habituales los cortes de ternera, cerdo y pollo, marinados con sabores como soja, ajo y jengibre. También es especialmente conocida la carne de cerdo negro de la increíble isla de Jeju, que gusta mucho por su textura tierna y sabor distintivo (y que podría casar muy bien con un maridaje estrella para carnes, como Alhambra Reserva Roja). Además, la barbacoa se acompaña de banchan -pequeños platos de delicias diversas- y salsas para mojar. En definitiva, toda una experiencia social y gastronómica, donde cada bocado es una celebración de sabor y tradición.
Compartir