Maestros del tiempo
True story. Nuestro relato de hoy cuenta con todos los ingredientes necesarios para capturarnos durante semanas. Contexto enigmático, melodía envolvente y un misterio tan, tan increíble que ni toda la potencia de la comunidad digital global ha sido capaz de desentrañarlo en los últimos cuatro años.
Por Cervezas Alhambra
Hablamos de, oficialmente, ‘The Most Mysterious Song On The Internet’ y nadie, ni el experto musical más versado en la materia, ha sido capaz de desvelar absolutamente nada. Cero resultados. No sabemos quién la escribió, quién la cantó, cuando se publicó… Nada. Ni una sola pista válida desde que el asunto se hizo viral en 2019. Y lo peor de todo es que, si estás en la onda ochentera, te va a sonar inquietantemente familiar cuando la escuches.
La canción tiene título. O mejor dicho, títulos. En realidad carece de nombre, pero la comunidad digital se los ha concedido porque nadie sabe nada cierto al 100% sobre ella. La denominan ‘Like The Wind’ o ‘Blind The Wind’ o ‘Check In, Check Out’ o ‘Take In, Take Out’. Rollo synth pop, new wave, estribillo pegadizo, letra en inglés con acento probablemente alemán… Y poco más. ¡Si la has escuchado y puedes identificarla tu información valdrá oro!
Pero comencemos por el principio, el contexto inquietante y los datos confusos. La leyenda arranca en el año 1984 (o en 1982 o en 1983) con una persona, un tal Darius S., quien se encontraba en su casa de Wilhelmshaven, en la costa norte de Alemania, grabando en casete las canciones del programa Musik Für Junge Leute de la Norddeutscher Rundfunk, NDR1, la radio pública del país. La grabación recoge diversos hits de grupos de moda del momento, como The Cure, XTC o The Police, y algunos otros menos conocidos. Darius le puso título a su compilación de 25 temas: ‘Unknown Pleasures’, como el mítico disco de Joy Division.
Como era habitual en los tiempos analógicos, el objetivo de estas grabaciones caseras consistía en evitar que la voz del locutor ‘pisara’ la música y se buscaba incluir sólo los fragmentos que, hábilmente, el protagonista de nuestra historia iba seleccionando mediante la arcaica técnica del REC+PLAY+PAUSE. Ni anuncios ni presentación ni despedida, sólo música y voz (en la medida de lo posible). Pasó el tiempo y llegamos al año 2004, al instante en el que el destino quiso que Darius se reencontrara con aquella cinta. Y no sólo eso, además decidió digitalizarla y guardar la información perfectamente ordenada. Identificó los temas que sonaban, todos menos uno. Le dio vueltas al asunto, preguntó, recurrió a internet en busca de información pero no obtuvo ningún resultado. Todavía recuerda las circunstancias que envolvieron aquel preciso momento: vivía en Berlín, hacía calor y su piso no tenía aire acondicionado.
Siguiente capítulo. Saltamos en el timeline hasta 2007. Lydia H., hermana de Darius y tan fanática de la música de los 80 como su hermano, se animó a echarle una mano con su búsqueda digital y recurrió a los buscadores habituales en busca de algún match con las letras o de algún indicio alentador. Vacío absoluto. De ahí pasó a crear un perfil bajo el username bluuue y el alias Anton Riedel, a cortar un extracto de la canción de 1:14 minutos (para no tener problemas con los posibles derechos de autor), y a subir diversos posts compartiendo aquella música misteriosa en https://www.best-of-80s.de/, un site especializado en los 80, y en https://spiritofradio.ca/ … Los mecanismos ocultos del azar acababan de ponerse en marcha.
La información comenzó a rebotar de un sitio a otro como suele suceder con los asuntos virales. Pasó de puntillas por diferentes foros de búsquedas como https://www.watzatsong.com/en y, en 2017, acabó aterrizando en la web de Dead Wax, un sello independiente centrado en synth pop y post punk. Todos alucinaron con el tema pero nadie supo ubicarlo, de manera que lo subieron a su canal de Youtube. La difusión del trocito de canción siguió creciendo, pero las cifras aún se mantenían por debajo de las 10.000 visitas. El empujón definitivo llegó en 2019 con una publicación del youtuber Gabriel da Silva Vieira, aka Gabriel Vieira, bajo el título ‘THE MOST MYSTERIOUS SONG ON THE INTERNET!’.
Gabriel se tomó aquello como un reto personal. Subió un cover en clave vaporwave del tema, se unió a la comunidad de Reddit para incrementar la difusión, publicó 44 posts sobre el asunto y, finalmente, el 27 de mayo de 2019, un periodista australiano especializado en música llamado Tyler Jenke redactó un artículo pidiendo ayuda para que Gabriel encontrara al autor de su misteriosa canción. El grupo Boards of Canada se hizo eco del llamamiento y subió la canción a Mega, Soundcloud y al website de la radio NTS. La revista Rolling Stone publicó un reportaje sobre el tema. Ahí ya todo se descontroló.
Miembros de Reddit, 4Chan y Discord rastrearon la grabación y, tras muchas horas de investigación, localizaron al DJ de NDR encargado del programa, el británico Paul Baskerville. Además, dieron con la supuesta lista de reproducción correspondiente a aquella noche. Cotejaron los temas que sonaron con los de la compilación de Darius y todo encajaba. Estaban todos… Menos la canción misteriosa. Baskerville explicó que sí, que aquella noche de hace casi 40 años él fue quien le dio play a todos aquellos temas, pero cuando escuchó la canción sacudió la cabeza de lado a lado. No la reconoció.
Contactaron con los responsables de la Gesellschaft für musikalische Aufführungs- und mechanische Vervielfältigungsrechte, GEMA, gestores de un enorme archivo público de música. Crearon un spreadsheet en Google con todas las bandas, músicos, sellos y personas consultadas hasta la fecha. Abrieron un servidor oficial en Discord con el título ‘Most Mysterious Song on the Internet’, el site de memes Know Your Meme abrió una página para la canción misteriosa… Incluso hubo un usuario de Reddit que trató de trolear al colectivo lanzando información inexacta e inventando una portada falsa de un grupo imaginario, pero fue rápidamente neutralizado. La canción más misteriosa de internet ha sonado en muchos programas de radio y su historia ha sido contada en numerosos medios de comunicación de diferentes países, pero nadie, ni una sola persona sobre la faz de la Tierra, ha sido capaz de aportar un dato fiable. El caso sigue abierto.
Los amantes de este misterio lo han probado todo y nada ha dado resultado. Hilando fino se habla de que, en teoría, el acento podría encajar tanto con Alemania como con los países de Europa del Este o, incluso, Finlandia, pero las búsquedas han fracasado en todos los frentes. Lo que sí ha conseguido el tema es unir, literalmente, a miles de personas bajo una sola misión: el desafío de encontrar alguna pista sobre ‘Like The Wind’. Actualmente existen comunidades enteras dedicadas a investigar el origen de la canción, fans que han creado versiones propias y usuarios que han reconstruido lo que, a su entender, podría ser la letra original. Una muestra más del poder de la música. Con el paso del tiempo, el tema se ha extendido a través de foros, plataformas, Twitter, Facebook, TikTok, sites como 4Chan… Hay quien afirma que cuando internet desaparezca, esta canción sonará de fondo mientras los créditos ascienden por la pantalla.
IMÁGENES | UNSPLASH
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