Maestros del tiempo
La extremeña es una tierra que sorprende. Por su variedad de paisajes y de escenarios, pero también por su gastronomía, de una amplia y exquisita riqueza, que consigue aunar vanguardia y tradición con maestría en establecimientos como estos.
Por Isabel Sauras
Extremadura es una tierra silenciosa, recia, con sabor auténtico y una sobrecogedora belleza natural que se hace mucho más evidente cuando llega la primavera y sus campos se visten de blanco. Son los cerezos del Jerte, que inundan las laderas del valle cuando florecen, un espectáculo efímero que apenas se puede disfrutar durante unos días cada año, pero que sirve de excusa a miles de turistas para visitar los preciosos pueblos de la comarca y degustar, en sus restaurantes, deliciosas recetas cocinadas a fuego lento inspiradas en las famosas cerezas y picotas del Jerte.
Junto a los platos, tertulias literarias, visitas culturales, rutas organizadas, mercados de artesanía, visitas a bodegas y lagares tradicionales y un sinfín de propuestas irresistibles planificadas por los vecinos de la zona.
Y, cuando la floración termina, continúa el espectáculo, porque es el momento de la Cerecera, cuando se recogen y se prueban los preciados frutos que cuelgan de más de un millón y medio de cerezos por todo el Jerte. Un momento extraordinario para viajar a Extremadura que, en primavera, siempre es una fiesta.
Desde estos paisajes salpicados de infinitos frutos rojos, vivir la gastronomía de la zona en todo su esplendor y maridarla con Cervezas Alhambra es un regalo para todos los sentidos. Aquí va un recorrido único por los sabores más auténticos de Extremadura.
Parada de la reina
Parada obligada en Plasencia para los amantes de la gastronomía viajera. Un equipo joven y dinámico que, en poco tiempo y con mucho esfuerzo, ha conseguido colarse en el ranking de los restaurantes mejor valorados de Extremadura.
El casco histórico de Plasencia, su preciosa plaza Mayor, sus catedrales, su muralla… La ciudad tiene mucho que contar a sus visitantes. Y para completar la experiencia cultural, nada mejor que apostar por una gastronomía de altura. Parada de la reina está situado en la estación de autobuses de Plasencia y propone a todos sus comensales un viaje sorprendente por la gastronomía, alejado de estereotipos y fronteras.
Para muestra, este sugerente plato escogido de su 'Menú Destino': albóndigas de res madurada con salsa de tomate de la abuela, palo cortado y tirabeques salteados con especias chinas, ideal para maridar con Alhambra Reserva Roja, que encaja a la perfección con carnes potentes. Desde Extremadura al mundo.
Santé
Después de recorrer las calles empedradas de Cáceres y admirar cada rincón de su impresionante patrimonio histórico y artístico, llega el momento de reponer fuerzas en uno de los lugares más concurridos de la ruta de tapas de la ciudad: Cervecería Santé, un local acogedor y desenfadado que brinda a sus clientes una exquisita gastronomía tradicional con toques actualizados.
Extremadura es tierra de sabores rotundos, como el aceite de oliva virgen extra, el jamón ibérico Dehesa de Extremadura o el pimentón de la Vera y, en Santé, saben bien que mimar el producto de la tierra es sinónimo de triunfar. Para que los paladares más exigentes salgan satisfechos de su establecimiento, el chef propone una combinación de lujo para degustar a la hora de comer: cazuelita de garbanzos con choco acompañadas de una Alhambra Lager Singular servida bien fría. Imposible resistirse.
Quotidiano
Pinturas y fotografías de artistas locales extremeños decoran las paredes de este espacio en Badajoz que aúna arte y gastronomía con una sorprendente maestría. Quotidiano Arte·Sabor es un espacio gastro-cultural que pretende ser punto de encuentro para pacenses y visitantes, para que disfruten del arte en torno a una mesa con platos originales, pero que conservan la esencia del sabor tradicional. ¿El objetivo? Conquistarnos y que queramos volver siempre a disfrutar de Badajoz y de su rica gastronomía.
Entre sus tentadoras propuestas, destaca el pulpo a la brasa con patatas al pimentón de la Vera con lágrima de guacamole o el flamenquín ibérico con salsa de curry. Sugerentes y actuales.
Al Andalus 3.0
Cáceres es una ciudad sorprendente en todos los sentidos. Patrimonio de la Humanidad y uno de los conjuntos históricos mejor conservados de Europa que bien merece una escapada cultural y gastronómica.
La esencia de Granada, cuna de Cervezas Alhambra, y su fuerte valor histórico es la fuente de inspiración de este restaurante situado en Cáceres, tanto en la decoración del local como en la cocina. En Al Andalus 3.0 encontramos platos y raciones que beben de la cocina andaluza tradicional y, sobre todo, un ambiente agradable para tapear de manera informal, Alhambra Lager Singular en mano. Cabe destacar su estupenda terraza, que resulta muy agradable cuando las noches cacereñas se vuelven más templadas. Un pedacito de Granada en Cáceres para los amantes de lo auténtico.
Los Puris
A muy pocos kilómetros de Cáceres y a un paso del Monumento Natural de Los Barruecos se encuentra la pequeña localidad de Malpartida, un lugar en el que, a priori, no se espera encontrar cocina de vanguardia, pero sí un establecimiento tradicional que ha pasado de padres a hijos. El restaurante Los Puri lo tiene todo.
En la misma plaza mayor de Malpartida se encuentra este local, una apuesta por la innovación desde el origen, un golpe de efecto a las buenas costumbres y un twist, sin complejos, a la gastronomía que conocían nuestros abuelos. Imprescindible su reinterpretación del rabo de toro, perfecta para combinar con Alhambra Reserva Roja. Si se necesita una buena excusa para volver a Malpartida y pasar por Los Puri, no hay que dejar de visitar el museo Vostel.
Imágenes | La Parada de la Reina | Santé | Quotidiano
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