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El Pirineo: tierra de leyendas
Descubrimos las leyendas ocultas en los bosques pirenaicos y localidades a las que viajar para conocer su historia
¿Te imaginas trasladarte a un lugar en el que de un amor prohibido nació una cordillera? Y si te contáramos que en ese mismo sitio un grupo de hormigas ocultaron a una joven de un potencial secuestro o que, siglos después, aquellas tierras vivieron su propia versión del juicio de Salem, ¿nos creerías?
Sumérgete en la magia y misterio del Pirineo
Entre leyendas y cuentos infantiles, el Pirineo esconde maravillosos rincones impregnados de mágicas historias perfectas para una escapada de montaña. Unos días para disfrutar sin prisa, olvidarse del ruido de la ciudad, volver a conectar y disfrutar de esa calma que solo se encuentra en plena naturaleza.
Además, después de una ruta de senderismo o de una jornada cultural descubriendo los rincones de las localidades que sirvieron de escenario a las fábulas de la zona, podrás sentarte y acompañar tu merecido descanso con una de tus Cervezas Alhambra favoritas. Por cierto, si tus paseos son en alta montaña, entre julio y septiembre agudiza la vista en busca de la maravillosa flor de las nieves más conocida como Edelweiss, una estrella que vio convertidas sus puntas en pétalos. Aunque está en peligro de extinción, por lo que debemos limitarnos a disfrutar de su belleza y dejar que siga adornando el paraje natural.
Las leyendas ocultas en los bosques del Pirineo y sus localidades llenas de historia
Debemos reconocer que el número de leyendas e historias que tienen al Pirineo como protagonista son tan elevadas que resultaría imposible hablar de todas ellas en un solo artículo. Por eso hemos escogido nuestras tres favoritas, aquellas que incluyen algo de romance, aventura, lealtad y magia en su esencia. En definitiva, los elementos perfectos para una noche de amigos, risas y cañas arropados por la protección de la montaña.
La tragedia de Hércules y Pirene
Pensar en un lugar que represente el amor prohibido es viajar de forma inconsciente a la ciudad italiana de Verona, de la mano de Shakespeare, con un romance imposible entre dos jóvenes llamados Romeo y Julieta.
Ahora bien, muchos siglos antes de que el dramaturgo inglés soñara con sus desdichados amantes, una bella princesa se enamoraba del hijo de un dios ante la fuerte oposición de la familia de ella. Es la historia de Pirene y Hércules, que vivían su amor oculto en los bosques hasta que el padre de la joven, el dios Tubal, descubrió y prohibió aquel romance. Pirene, fiel a su amado, decidió rechazar a sus futuros pretendientes entre ellos a Gerión, un monstruo de tres cabezas que no dudó en quemar todas las tierras ante la falta de interés que la chica mostró por él. Cuando Hércules descubrió lo que había ocurrido y regresó, encontró el cuerpo sin vida de la princesa yaciendo en la tierra, lugar en el que la enterró y protegió con unas altas montañas que hoy conocemos como los Pirineos.
De la mano de esta trágica historia te proponemos que, si te apasiona el senderismo, reserves un fin de semana para adentrarte en una espectacular ruta por la Geganta Adormida y descansar en Peramea, villa medieval de Baix Pallars que forma parte de la la comarca del Pallars Sobirà (Lleida). Declarada Bien Cultural de Interés Nacional, te recomendamos que guardes unas horas para pasear por sus calles, así como visitar los restos del Castillo de Peramea –del que se tiene constancia ya a principios del siglo X–, la iglesia románica de Sant Cristòfol y la iglesia de Sant Sebastià i Sant Roc, la torre del Colomer o el dolmen de la Mosquera.
La lealtad de una colonia de hormigas blancas
Es difícil esquiar en Formigal, o pasear por sus laderas en verano, sin recordar que, según cuenta la leyenda, su creación partió de un acto heróico de un grupo de hormigas blancas. Sí, como lo oyes, un grupo de formigas que no dudaron en servir como escudo protector para la diosa Culibillas en su ardua huída de Balaitús. Como el plan funcionó a la perfección, el temido villano desplegó su venganza contra las leales hormigas provocando la muerte de muchas de ellas. Por ello, y en señal de eterno agradecimiento, Culibillas se clavó un puñal en el pecho convirtiéndose así en la protectora de sus fieles amigas, dándoles cobijo en su cuerpo y provocando con ello el nacimiento de la Peña Foratata.
Si decides recorrer la zona, no lo dudes y haz noche en Sallent de Gállego (Huesca), una típica localidad del Pirineo en la que predomina la construcción en piedra y pizarra, situada en un lugar privilegiado: frente al embalse de Lanuza con la Peña Foratata a modo de muralla.
Los calderos del Pirineo: de las meigas gallegas a las guixas aragonesas
Todo libro de cuentos necesita su historia de misterio, por lo que no podemos abandonar nuestra cordillera sin detenernos en Villanúa (Huesca). Un lugar en el que se cuenta que entre los siglos XV y XVI condenaron a muerte a varias mujeres acusadas de brujería, entre ellas Guirandana de Lay, que se convertiría en la primera sentenciada por hechicería. En esta localidad se encuentra la Cueva de las Güixas que, al margen de leyendas que indican que era el sitio en el que las temidas brujas celebraban sus aquelarres, es un plan familiar perfecto para adentrarse en una gruta y entender los secretos más ocultos de los Pirineos.
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