El final dulce para el que siempre dejamos un hueco, en su versión recién salida del horno.
Por Esther Morales
El postre, el colofón para el que siempre hay hueco. A veces de forma compartida: con varias cucharillas al unísono que se deleitan con el sabor y la textura de una rica mousse, una tarta o una de esas torrijas, que están a punto de iniciar su temporada. La muestra perfecta del poder de unión que tiene la repostería. Bien como excusa para juntarse en la cocina o bien, para celebrar los buenos momentos -como hacemos al brindar a la salud de los nuestros con Cervezas Alhambra-.
Eso explicaría por qué lo dulce tiene esa capacidad de transportarnos, de traer recuerdos que surgen a través del gusto y el olfato. Sensaciones inigualables como la de percibir el aroma de un bizcocho antes de entrar en casa de una abuela, rebañar -a golpe de lengua- la nata que se ha quedado impregnada en las varillas o adentrarse en una cocina donde el calor de su horno conquista cada rincón.
Un calor que se agradece como nunca durante los días de frío que siguen presentes a las puertas de la primavera. La excusa necesaria para deleitarse con postres que saben a tardes lluviosas, a memorias con sabor a canela y a bocados en caliente que reconfortan nuestros sentidos. Cinco postres para tomar nada más terminar la elaboración y atemperarse, desde el paladar, en clave dulce.
Manzana asada
Un postre de invierno fácil, económico, versátil y delicioso. Se pueden preparar en el horno al natural y espolvorear con un poco de canela. También se pueden trocear para preparar un crumble o, simplemente, sacar toda su pulpa para hacer un rico puré. Con un poco de miel, son toda una perdición… y con una mezcla de frutos secos en su interior, pasarán a ser uno de tus dulces favoritos para estos meses de entretiempo. Ideal para acompañar con un maridaje nada convencional, como Alhambra Barrica de Ron Granadino, la variedad infalible para combinar con canela.
Panchón
El panchón es un dulce típico del Principado de Asturias, más concretamente del concejo de Aller. Tiene fechas señaladas en las que es tradicional comerlo, pero es fácil encontrarlo en muchos restaurantes locales durante cualquier época del año. Se elabora con solo tres ingredientes, harina de escanda, manteca y azúcar, y se disfruta en caliente, como si fueran unas gachas o un pudin de pan. La prueba de que lo sencillo no está exento de conquistar en boca.
Strudel de pera
El postre alemán por excelencia, pero con un toque de sabor diferente. Ya se sabe que hay un tipo de pera para cada mes del año, así que esta es una forma muy interesante de integrar esta fruta atemporal en los postres y disfrutar sus distintos matices. Además de la fruta, se pueden incorporar unas nueces o un poco de chocolate para generar más contraste. Aunque es un postre hecho para comer en caliente, también es apto para tomar frío, a modo de hojaldre relleno.
Crumpets con miel
El famosísimo desayuno inglés, con huevos, alubias y bacon, también tiene una alternativa que se concibe a modo dulce. Lo hace a través de los crumpets, una especie de tortitas tan británicas como la hora del té o las cervezas Stout (como Las Numeradas Cacao de Cervezas Alhambra). Recién salidos de la sartén y, en caliente, combinan muy bien con un poco de mantequilla o un toque de miel. También se les puede añadir alguna mermelada casera de frutas de temporada o, simplemente, darle un toque más español con un poco de dulce de higo. Sus alternativas de sabor no tienen límites, lo que nos permitirá reinventar la receta una y mil veces.
Fondue dulce
La versión dulce de la clásica fondue de queso, que calienta los Alpes cada invierno. También es una manera estupenda de homenajear a la tradición más chocolatera de países como Bélgica, Suiza o Austria. Se puede acompañar de clásicos de temporada -como las fresas-, o con cualquier otra fruta, galletitas saladas o, incluso, frutos secos. En destinos como Japón también ha empezado a ganar presencia una versión con sabor cien por cien nipón. La fondue, en su caso, se elabora con chocolate blanco y té matcha en polvo, y se acompaña con productos como los mochis -uno de los bocados dulces más populares del país asiático-.
Imágenes | Perfil de Facebook de Turismo de Asturias
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